ABERRACIONES BÍBLICAS I
Fue
por allá, en el 2012, que publiqué el artículo ”Aberraciones Bíblicas”, y en él ofrecía (hace ocho años),
seguir dando a conocer más capítulos y versículos de “La Biblia”, en los que se
ponen de manifiesto innumerables aberraciones, y finalmente, acá
los tienen en ABERRACIONES BÍBLICAS I.
Son
muchos los mencionados capítulos y versículos, por lo que, en consecuencia, en
esta oportunidad sólo haré alusión a varios de ellos, comprometiéndome a darles
a conocer (en posteriores oportunidades), más aberraciones bíblicas como en este ABERRACIONES
BÍBLICAS I.
Las bendiciones
En
Deuteronomio (libro atribuido a Moisés), capítulo 28 versículos del 1 al 14
encontramos que a cambio de guardar y poner por obra todos los mandamientos que
Jehová le prescribe al pueblo de Israel y además oír la voz de Jehová su Dios.
Dicho
pueblo será exaltado sobre todas las naciones de la tierra y vendrán sobre el
pueblo todas las bendiciones mencionadas en dichos versículos: serán benditos
sus graneros, y todo aquello en lo que pusiera su mano, también será
bendito en la ciudad y en el campo.
¿Y las maldiciones?
Cabe destacar que así como lo bendice, lo maldice (como
podemos apreciar en los 53 versículos del
mismo capítulo 28, que van del 15 al 68), si no oye la voz de Jehová su Dios,
para procurar cumplir todos sus mandamientos y los estatutos que él le
requiere.
Las
maldiciones son de lo más variadas y van desde maldecir la canasta del pueblo, el
fruto de su vientre, el fruto de su tierra, la cría de sus vacas, y los rebaños
de sus ovejas, hasta destruirlo, y, aún más que sus cadáveres sirvan de comida a toda ave del cielo y fiera de la
tierra.
Lo aberrante
Pero
lo máximo y aberrante de las maldiciones que, sin duda, con mucho superan las “bendiciones”,
lo encontramos en los cinco versículos que van desde el 53 al 57 del ya
mencionado libro de Deuteronomio, de los cuales apreciado lector, presento a tu consideración los versículos
53, 55 y 57:
El que en diferentes
versículos bíblicos se nos presenta como un Dios de amor, castiga así, de
manera aberrante a su pueblo escogido: 28:53 y comerás el fruto de tu vientre,
la carne de tus hijos y de tus hijas que Jehová tu Dios te dio, en el sitio y en el
apuro con que te angustiará tu enemigo.
Debido a que no guardaron los mandamientos que Jehová le
prescribe, él hace que los padres se vean obligados a comerse a sus hijos: 28:55 para no dar a alguno de ellos de
la carne de sus hijos, que él comiere, por no haberle quedado nada, en el asedio y en el
apuro con que tu enemigo te oprimirá en todas tus ciudades.
¿Cuál
es el pecado que podían haber cometido los hijos? además ¿Es justo que los inocentes niños paguen las posibles
transgresiones de sus padres?: 28:57 al recién nacido que sale de entre sus pies, y a
sus hijos que diere a luz; pues los comerá ocultamente, por la carencia de todo, en el
asedio y en el apuro con que tu enemigo te oprimirá en tus ciudades.
Y
todo sucede en contraste con lo señalado en el capítulo 18 del libro de
Ezequiel, versículos del 1 al 3: 1.- Vino a mí palabra de Jehová, diciendo: 2.- ¿Qué
pensáis vosotros, los que usáis este refrán sobre la tierra de Israel, que
dice: Los padres comieron las uvas agrias, y los dientes de los hijos tienen la
dentera? 3.- Vivo yo, dice Jehová el Señor, que nunca más tendréis por qué
usar este refrán en Israel.
Un
padre, por la razón que ama
a sus hijos siempre se gozará en hacerles bien, solamente un padre psicópata se
gozará en destruir a sus hijos; y siempre La Biblia nos ha dicho que Jehová es
nuestro padre: Deu
28:63 Así como Jehová se gozaba en haceros bien y en multiplicaros, así se gozará Jehová en
arruinaros y en destruiros; y seréis arrancados de sobre la tierra a la cual
entráis para tomar posesión de ella.
TODO LOHACE DIOS
Según
La Biblia todo cuanto es y cuanto acontece es obra de Dios, lo bueno, e igualmente lo
malo: Lamentaciones
3:37-38 37.- ¿Quién
será aquel que diga que sucedió algo que el Señor no mandó? 38. ¿De la boca del Altísimo no sale
lo malo y lo bueno?
Existe
un axioma jurídico que significa que quien confiesa algo libera a la contraparte
de tener que probarlo, dicho axioma es: “A confesión de parte, relevo de
pruebas”. Cabe destacar que, según La biblia, Jehová afirma
ser él, quien hace la paz y crea la adversidad: Isaías
45:06-07 6. Para que se sepa
desde el nacimiento del sol, y hasta donde se pone, que no hay más que yo; yo
Jehová, y ninguno más que yo, 7. que
formo la luz y creo las
tinieblas, que hago la paz y creo la adversidad. Yo Jehová soy el que hago todo
esto.
De
ser como dicen en los párrafos anteriores los libros de Lamentaciones e Isaías:
“que de la boca del Altísimo sale lo malo y lo bueno, y que Jehová forma la luz y crea las tinieblas, hace la paz y crea la
adversidad”, porque él Jehová, el Altísimo así lo
decide, a que vienen tantas maldiciones, habida cuenta que, él reconoce ser el
autor de lo acontecido.
“Ahora
se suele criticar a la televisión por transmitir tanta violencia, cuando más
cruel ha sido la Biblia: en sus páginas se come a niños, se llama a matar a los
enemigos, se queman casas, se sacan los ojos a los hombres. Los dueños de la
televisión moderna no han inventado nada nuevo” (Ryszard
Kapuscinski)
Los capítulos y versículos citados en esta entrada
han sido tomados de La Biblia Reina Valera 1960.
Hago del conocimiento de mis apreciados
lectores que por ningún motivo, y bajo ninguna circunstancia tengo intenciones
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